Los malestares físicos
son indicadores de conflictos emocionales,
es necesario oír los mensajes que envía
el cuerpo
para restablecer la energía.
Malestares, dolores, síntomas
de que algo está sucediendo en nuestro cuerpo. Manifestaciones del mundo
interno. Estrés, tristeza, ansiedad, pequeños sucesos, situaciones de disconformidad son signos de
contradicción.
El cuerpo avisa, pide
solucionar circunstancias desfavorables, re-direccionar la vida, encaminarse
hacia otras metas, las "sentidas profundamente". Se hace necesario
erradicar emociones adversas, pensamientos y creencias arraigados que ocasionan
desequilibrio en la salud.
Cada enfermedad
está relacionada con alguna situación, por ejemplo, las dificultades en
la zona de la garganta son por aquellas palabras que no se dijeron. Claramente
el cuerpo indica que es lo que se tiene que resolver.
Es
importante poner atención en la zona afectada. Recordar las circunstancias que
se estaba viviendo. ¿Cuáles fueron los sentimientos en ese momento? ¿Qué
pensamientos surcaron la mente? El cuerpo lo cuenta todo, solo hay que darle atención,
atender sus manifestaciones y profundizar en la soluciones.
El cuerpo
nos avisa para ayudarnos, comienza dando señales pequeñas, está en cada uno afrontarlo, resolver conflictos
pendientes, darle la importancia que tienen, ya que son manifestaciones psicológicas sobre algo que nos perturba.
Replantear la situación, observar lo que podemos
modificar para sentirnos equilibrados, agradecer la posibilidad de superar tempranamente los conflictos, sin dejarlos que se conviertan
en una enfermedad.
Recomponer
el circuito energético del cuerpo y mente, positivizar las emociones para que
cada día se viva más feliz.
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